Antes de empezar, asegúrate de que el cortacésped está en perfectas condiciones y de que la cuchilla esté afilada. Además, verifica que el cable esté correctamente conectado y en buen estado. De lo contrario, podrías correr el riesgo de sufrir un accidente.
A continuación, ajusta la altura de corte a la longitud deseada para el césped y enciende el cortacésped. Avanza lentamente y en línea recta, para asegurarte de que el corte sea uniforme. Si necesitas hacer giros, hazlos de forma suave para evitar que se acumule el césped cortado.
Cuando hayas terminado, apaga el cortacésped y desconéctalo de la corriente eléctrica. Limpia la cuchilla y las ruedas para evitar la acumulación de hierba y residuos que puedan afectar su desempeño.
Recuerda que el uso de un cortacésped eléctrico es una tarea sencilla, pero requiere de precaución y atención. Siguiendo estas recomendaciones, podrás disfrutar de un césped cuidado y hermoso en tu jardín.
